02/12/2017 | Isaías Ledesma Plaza, Pedro Sanchez Soto, Isabel Sicilia Lorente, Jorge Rincon Nogales Los enfermos mentales indefensos ante la «contención mecánica» Versión original en catalán A las personas con enfermedades mentales, en los hospitales psiquiátricos, en las residencias, en las unidades de hospitalización de los hospitales generales así como en la atención en urgencias, se les aplica, de forma relativamente habitual, una práctica de coacción violenta a la que se le da el nombre de contención mecánica o, de forma más maquillada, inmovilización terapéutica. Se trata de una práctica poco ortodoxa desde el punto de vista sanitario. Consiste en atar con correas a los pacientes a una cama o a una silla. No es un tema del que se hable. Es vergonzoso. Se oculta. Sin embargo, esta práctica supone riesgos graves para la persona en su salud, tanto física como psicológica, y puede producir secuelas e incluso conlleva riesgo de muerte. El 5 de mayo de este año, una chica de 26 años, descrita como «encantadora, racional y con la cabeza en su sitio», murió atada a la cama por una parada cardíaca en la planta de psiquiatría del Hospital Universitario de Asturias. En marzo de 2006, cinco personas con enfermedad mental fallecieron en un incendio, atrapadas e inmovilizadas, estando atadas a la cama en una residencia de Massamagrell. ¿Cuantos casos quedan sin salir a la luz? «Recuerdo que estaba ingresado en la Unidad de Psiquiatría. Pusieron 2 paquetes de tabaco sobre el mostrador de enfermería. Era fin de año y cogí un paquete para […]