Raquel Yotti: «No se puede diagnosticar a todos los pacientes con test de antígenos, la sensibilidad en asintomáticos es menor»
Fuente: Fragmento de articulo publicado en Theconversation.com
Desde el Centro Nacional de Microbiología han coordinado estudios para validar la fiabilidad de los test de antígenos. ¿Qué opina de estas pruebas que tanta relevancia están ganando?
La fiabilidad es alta, pero la mayor parte de las personas en las que se han probado en condiciones reales tienen síntomas. En pacientes con síntomas, y dentro de los primeros cinco días, la fiabilidad es muy alta tanto en sensibilidad como en especifidad, que ronda el 100 %. Son una ventaja que permite diagnosticar una infección activa fuera de los hospitales de forma rápida y sin equipamiento complejo, siempre que se utilice en las condiciones adecuadas.
¿Cuáles son esas “condiciones adecuadas” que debemos tener en cuenta?
Los test antigénicos pueden tener problemas asociados, porque no se puede diagnosticar todo con ellos y tienen limitaciones. Sabemos que la sensibilidad en pacientes asintomáticos y entre contactos es menor. Esto posiblemente esté vinculado a varios factores como la carga viral, que disminuye la capacidad de detección si es baja. También a la dificultad de identificar ese período de cinco días en los que funcionan muy bien.
¿Cree que es buena idea que sean accesibles hasta el punto de venderse en farmacias?
Lo de las farmacias es muy complejo. En primer lugar, la extracción de la muestra de exudado nasofaríngeo que se requiere no es sencilla ni inmediata. En segundo lugar, tiene que existir una coordinación y un diagnóstico clínico. [El test] se tiene que indicar en coordinación estrecha con los servicios de salud y salud pública, y [dejando claro] quién se responsabiliza de un positivo y de las instrucciones a los pacientes. También evaluar y otras cuestiones como el impacto de falsos positivos y negativos.
Debe analizarse en profundidad antes de tomar la decisión rápida de utilizarlos fuera de los ambientes sanitarios para los que se han diseñado. Va más allá de que se pueda hacer: tienen que integrarse en el sistema sanitario y pensar en las repercusiones que tendrá para este.