Se inicia una nueva etapa favorable a la Defensa del Derecho a la Salud
El gobierno de coalición progresista surgido de la voluntad popular inicia una nueva etapa favorable a los fines que son la razón de ser de Osalde y demás colectivos en defensa de la salud pública y en general al derecho a la salud en un sentido amplio.
Un periodo que promete ser tan prometedor como difícil, a juzgar por la actitud de crispación e intolerancia de una derecha extrema que, sin dejar espacio a la propia extrema derecha, muestra su peor cara, antidemocrática, amenazadora y dispuesta a cualquier cosa con tal de impedir la formación del gobierno de coalición progresista, y repetir las elecciones generales hasta lograr gobernar un país que al parecer consideran suyo.
Pero no hay cambio sin resistencia y ésta misma es prueba de auténtico cambio. El cambio que tantas instancias progresistas y diversas vienen reclamando con insistencia ante la parálisis y regresión de un régimen nacido hace más de cuarenta años que no responde a las demandas de los tiempos que corren y la madurez democrática de nuestra sociedad.
Osalde se dispone a enfrentar ésta nueva etapa con un entusiasmo y energía renovadas, aunque nunca debilitado, pues en ningún momento ha cesado en su empeño fundacional. Por un lado en la denuncia de los continuos ataques al derecho a la salud, empezando por la exclusión del derecho de diversos colectivos, los recortes, las privatizaciones y la servidumbre a intereses económicos ajenos de gobiernos cómplices del progresivo deterioro de los Sistemas Públicos de Salud. Y por otro en el apoyo y colaboración con cualquier politica progresista que haya supuesto una potencial oportunidad para mejorar o evitar el deterioro del derecho a la salud y sus condicionantes.
Tanto la recuperación de lo perdido como la corrección e implementación del propio sistema sanitario como de las demás políticas que determinan la salud y el bienestar de las personas, constituye una labor que exige un cambio de paradigma fundamentado tanto en la constelación de nuevas ideas, inquietudes, demandas y sensibilidades que representan los componentes del nuevo gobierno como del apoyo entusiasta de sus bases políticas y ciudadanas en unos momentos críticos que exigen firmeza y perseverancia ante el ambiente de hostilidad y provocación de una oposición que obscenamente se manifiesta «dispuesta a todo».
En muchas ocasiones, tanto desde la Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública FADSP, como OSALDE, hemos dado a conocer a la opinión pública nuestra propuestas a tal fin. En circunstancias poco favorables a verdaderos cambios. La ruptura del bipartidismo y la voluntad popular de cambio, son la ocasión histórica de lograr la recuperación y emprender la reforma hacia dinámicas favorables al derecho a la salud frente a los intereses del mercado.
Osalde no ha mostrado en ningún momento una definición politica ni sectaria, abarcando un amplio colectivo de ideologías y sensibilidades representativas de los sectores progresistas de nuestra sociedad. Ha colaborado con los diferentes Gobiernos de Euskadi en importantes Proyectos tanto dentro como fuera de nuestra Comunidad cuando confluían los intereses. Siempre ha estado abierto a la participación de las entidades progresistas, lo que ha expresado más firmemente desde el Foro Vasco por la salud ‐ Osasun aldeko Euskal Foroa.
El día 22 de junio de 2016, el Foro realizó una presentación publica del documento “50 MEDIDAS PARA MEJORAR LA SALUD DE LOS CIUDADANOS Y CIUDADANAS EN EL PAIS VASCO, POR EL FORTALECIMIENTO DE LA SANIDAD PUBLICA VASCA”. En estos años transcurridos, desafortunadamente poco ha cambiado, por lo que dicho documento sigue siendo válido. Y es que la calma chicha de un régimen caduco impide dar un paso adelante. Prueba del atasco son las cuartas elecciones en cuatro años. Una situación reclama el impulso dinamizador del cambio que hoy la voluntad democrática expresada en las urnas promete. Para ello, Osalde, junto a las demás asociaciones y movimientos ciudadanos que trabajan por el Derecho a la Salud en un sentido amplio, se dispone a apoyar toda iniciativa del nuevo gobierno progresista del cambio favorables a las medidas propuestas tanto desde este FVS como de otros de nuestra sociedad que en esencia coinciden, así como a soportar una oposición reaccionaria que se ha manifestado dispuesta a todo. Por lo que no faltarán provocaciones para romper la unidad de apoyo y acción entre las fuerzas diversas que componen el nuevo gobierno y muestran la identidad de nuestra ciudadanía. La labor de gobierno se muestra compleja y llena de dificultades que necesariamente van a necesitar de la paciencia y firmeza de todas las personas que han expresado su apoyo en las urnas y son conscientes de las dificultades que entraña la inercia de unos intereses firmemente asentados en un periodo de estabilidad democrática al que le ha llegado, como los hechos tozudamente demuestran, la hora del cambio.