«… mi marido y mi hija se empeñan en comprar leche sin lactosa porque en el gimnasio alguien les ha dicho que es más saludable, que adelgaza al quitar el azúcar y que hincha menos la barriga. ¿Es eso cierto y me estoy perdiendo algo maravilloso o bien les están engañando como bobos?» Fuente: eldiario.es Jordi Sabaté 3-1-2018 Sin llegar a tildar de ‘bobos’ a los que creen en los beneficios de la leche sin lactosa, lo cierto es que sí son víctimas de una de las últimas modas nutricionales sin sentido y toda la información en forma de leyenda urbana que la acompaña. Los argumentos relatados por Analía en su correo no solo resultan ser falsos, sino que también despistan respecto a los posibles beneficios de la lactosa, así como de los peligros de eliminar su consumo si no somos intolerantes. Para aclarar este asunto lo mejor es relatar los ocho mitos que se han desplegado en torno a la leche sin lactosa, a veces de modo tan inocente como ignorante, pero otras estando detrás los velados intereses de la industria lechera, que hace uso del marketing menos honesto. Mito 1: la lactosa es mala Antes que nada aclarar que la lactosa no es ni buena ni mala, simplemente es el azúcar propio de la leche, que se encuentra en una proporción del 5%. Se trata de un disacárido formado por una molécula de glucosa y otra de galactosa, un azúcar que en el hígado se transforma en glucosa. La lactosa no se puede absorber por vía […]