«Las residencias no son aparcamientos de coches»
Fuente: 65ymas Asociaciones de familiares de dependientes comparecen en el Parlamento Vasco
Familiares de usuarios de residencias han reclamado «cuidados dignos» para las personas dependientes con la creación de un Servicio y presupuesto propio para el ámbito sociosanitario, y han denunciado el incumplimiento de los protocolos en los centros sanitarios que, a pesar de que contemplan el mantenimiento de las visitas durante la pandemia, «luego cada residencia hace lo que le da la gana» y hay usuarios que «están peor que en la cárcel». «Queremos cuidados de calidad y cuidados emocionales. Las residencias no son como aparcamientos de coches», han subrayado.
Las asociaciones de familiares de dependientes Babestu Araba, Babestu Bizkaia y Gipuzkoako Senideak han comparecido ante la Comisión de Políticas Sociales y Juventud del Parlamento Vasco para denunciar la situación de las personas dependientes, tanto las que están en residencias o centros sociosanitarios como las que se encuentran en sus casas.
La portavoz de Babestu Bizkaia, Iraide Urriz, ha criticado que las instituciones «han puesto parches» a la situación y ha expresado que los familiares sienten «impotencia» porque ven que se están haciendo «muchas cosas mal». «Se ponen parches para quedar bien. Vemos que hay muchas carencias y siempre la pelota se tira a tejado ajeno», ha lamentado.
En este sentido, ha subrayado que, si la situación de los mayores es «tan importante» para las administraciones, ha preguntado «por qué no se ha contratado a más gente». «Queremos cuidados dignos», ha reclamado.
Respecto al último protocolo para los centros sociosanitarios, ha recordado que en el mismo se dice las visitas «son muy importantes», pero hay usuarios que «están peor que en la cárcel». «Los tenemos secuestrados, cerrados, no los podemos ver y muchos están muy mal porque no pueden estar solos horas y horas. No se puede levantar a la gente a las siete de la mañana para tenerla sentada en un sofá», ha reclamado.
En este sentido, ha criticado que en este protocolo no se concretan las medidas y «luego cada residencia hace lo que le da la gana«. «Queda muy bien decir que tenemos que proteger a las personas vulnerables pero luego no hacen nada», ha criticado antes de subrayar la necesidad de que se invierta dinero.
Urriz ha destacado que desde marzo «han pasado ya muchos meses para aprender qué es lo que ha pasado» y se ha preguntado «cuántas personas han muerto y por qué no se da la verdad rotunda». «Hemos empezado a sacar esto a la calle porque vemos que el sistema no vale. «Nosotros queremos cuidados de calidad y cuidados emocionales también. Las residencias no son como aparcamientos de coches«, ha zanjado.
El portavoz de Babestu Araba, Guillermo Perea, por su parte, ha criticado que las tres asociaciones no han recibido «ninguna respuesta» a sus peticiones para reunirse con el lehendakari y ha denunciado que las Juntas Generales también les han negado sus comparecencias, salvo en Bizkaia.
Asimismo, ha defendido que el presupuesto para 2021 es «clave» para «tener una garantía de que la situación va a cambiar», ya que ha denunciado que este año 2020 «no se están tomando medidas de contratación de personal nuevo, salvo las situaciones de emergencia que se han producido».
Residencias privadas
Respecto a la situación de las residencias privadas durante la primera ola de la pandemia, ha criticado que «no ha habido ninguna intervención». «Los escándalos en las residencias privadas han sido enormes y no ha habido intervención, ha habido atenciones esporádicas», ha asegurado.
También ha denunciado que los centros de salud tienen una función que «no se ha cumplido» cuando «las personas que viven en sus casas, como a las personas que viven en residencias, hay que atenderles» porque «es su obligación y no vale decir que no tienen personal contratado». «Se está muriendo gente en las viviendas y se están llevando por delante a las mujeres cuidadoras«, ha advertido.
Para las asociaciones «es necesario e imprescindible crear un servicio propio, con un presupuesto propio» para el ámbito sociosanitario. «Hasta ahora esto no ha existido y ha permitido camuflar la atención sanitaria con la atención sociosanitaria, que no es lo mismo», ha denunciado.
Por otro lado, ha subrayado la importancia de que las instituciones ofrezcan los datos de lo ocurrido en la primera ola de la pandemia en cada Territorio porque «tiene una importancia bestial». «Hay que concretar; eso se tiene que hacer y Osakidetza tiene poder legal para hacerlo», ha asegurado.
Para Perea, «no se ha hecho porque no se quiere hacer» porque «se están defendiendo intereses privados». «Hay mucho negocio a cuenta de nuestros mayores y eso no puede existir, pero es por falta de atención de las administraciones. No se puede camuflar el tema, diciendo que se está coordinando a las diputaciones y el Gobierno vasco y los ayuntamientos», ha criticado.
Tras afirmar que esta situación es «un escándalo», ha pedido a los grupos parlamentarios que «pongan las condiciones para que esto no vuelva a ocurrir».
Respecto al protocolo de los centros sociosanitarios, ha defendido que «si hay una orden del departamento de Salud y Osakidetza, esa orden hay que cumplirla, no hay que manipularla, que es lo que han hecho las diputaciones».
Los partidos
La parlamentaria del PNV Maitane Ipiñazar ha puesto en valor el trabajo de las asociaciones de familiares pero ha defendido el trabajo realizado por las administraciones de coordinación y con la elaboración del protocolo para los centros socionitarios. «Está claro que tenemos que avanzar pero les aseguro que se está tratando de responder a esta pandemia mundial, dentro de lo que se puede, lo mejor posible por el bienestar de todos», ha señalado.
El parlamentario de EH Bildu Ander Rodríguez ha criticado que en Euskadi se han adoptado en las residencias las medidas para evitar contagios de covid-19 «que no tienen coste económico para la Administración», ya que en lugar de incrementar el personal, se prohibieron las visitas de familiares y ha reclamado la adopción de medidas para defender «la salud física pero también mental» de los usuarios.
La parlamentaria del PSE Gloria Sánchez ha defendido la necesidad de impulsar la coordinación entre las diferentes administraciones para evitar que la situación de la primera ola en las residencias se pueda volver a producir. «Hay que seguir adoptando medidas para reforzar el sistema de servicios sociales y corregir los errores que la pandemia ha podido poner sobre la mesa, en una situación excepcional», ha señalado.
La parlamentaria de Elkarrekin Podemos-IU Isabel Gonzalez ha destacado el papel de los familiares en el cambio residencial que se necesita». «Las instituciones llevamos tiempo cuidando mal a las personas mayores y el coronavirus no puede ser una excusa, esta crisis es estructural y ha dejado claro la precarización y la crisis del sector», ha asegurado.
Desde PP+Cs, Laura Garrido cree que con esta comparecencia «ha quedado claro que hay un problema con las residencias» y cree que las pruebas que se realizan y el material del personal «no es suficiente». la coalición ha pedido una «realización periódica» de pruebas PCR en estos centros.
Por último, la parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha destacado que las residencias de personas mayores «son las que más saña sufren las consecuencias de esta pandemia» y ha criticado que en esta segunda ola «estaban avisados».
A la misma hora de la comparecencia, las asociaciones de familiares de dependientes Babestu Araba, Babestu Bizkaia y Gipuzkoako Senideak se han concentrado frente a la Cámara vasca, en Vitoria, con el lema ‘SOS. Prioridad a los cuidados públicos y dignos’.