La negligencia ciudadana vasca
Ante el descontento ciudadano por el mal funcionamiento de los servicios de salud, la respuesta de quienes gobiernan la sanidad vasca es siempre la misma: “somos los que más gastamos por habitante y año”. No sé cómo no se sonrojan cuando lo dicen, pues si gastamos mucho y somos ineficientes es evidente que existen graves problemas estructurales y de gestión. Y ello, especialmente en esta Comunidad, está íntimamente y orgánicamente relacionado con quienes gobiernan.
Los tres componentes de un Servicio de Salud son: el elemento institucional, el elemento profesional y los que reciben los cuidados. De la buena interacción de los tres dependerá la calidad del Servicio.
En Euskadi, el tercer componente sociológico, ni existe ni participa porque a diferencia de otros países de la UE no hay Asociaciones de Pacientes que atiendan sus quejas, les ayuden, recojan datos, presionen a la administración y a los profesionales, les informen y, apoyen en la defensa jurídica contra la inmensa prepotencia de la administración vasca. Esta negligencia ciudadana tiene también su responsabilidad en el deterioro de nuestra sanidad.
Fdo Iñigo jaca Arrizabalaga