Coronavirus y sindicalismo

Coronavirus y sindicalismo

Fuente: Naiz.eus Anton Altamirano 2020/03/13

Desde el sindicalismo activista y de izquierdas tenemos que estar atentos. Por un lado, en la defensa de la sanidad pública y por otro en el desenmascaramiento del circo mediático del que viven muchos medios de comunicación.

El temor ha sido siempre uno de los aliados más fieles del poder, que intenta que la población viva inmersa en él. El sindicalismo de izquierdas está obligado a informar de forma transparente a la ciudadanía, combatiendo con la verdad y la información el miedo que pueda generarse para el control social.

Es evidente que con el Coronavirus tenemos un problema de salud pública, sí, pero nos asusta el tratamiento que se le está dando, utilizando el miedo de forma gratuita, provocando así una alarma social imposible de gestionar. Una sobredimensión del problema que pone en jaque a la sanidad pública, la única con capacidad real para dar respuesta a este tipo de epidemias y garantizar asistencia a toda la población, sin importar su edad, sexo, procedencia o nivel socioeconómico.

Los datos revelan que la capacidad para contagiar del nuevo coronavirus es limitada y su letalidad hasta la fecha no es superior al de otras afecciones relacionadas: el SARS provoca la muerte al 9,6% de las personas infectadas identificadas y el MERS, al 34%. En estos momentos las cifras de mortalidad asociada a la infección por el nuevo coronavirus fluctúan bastante, pero se estima que se encuentran entre el 2 y el 3%. Se trata de una mortalidad muy baja en comparación con otros virus respiratorios.

No nos olvidemos tampoco de las posibles situaciones que se puedan aprovechar y justificar, para usarlo en cierres de empresas, en ERTEs, que se utilizan como instrumento de regulación de empleo y supresión de puestos de trabajo.

Por todo ello, desde el sindicalismo activista y de izquierdas tenemos que estar atentos. Por un lado, en la defensa de la sanidad pública y por otro en el desenmascaramiento del circo mediático del que viven muchos medios de comunicación. Debemos de estar vigilantes y no entrar en su juego, así como denunciar su actitud como amplificadores de las amenazas, peligros y construcciones terroríficas. Son los primeros interesados en reproducir los peligros, a menudo porque comparten las mismas vinculaciones políticas y/o económicas que se esconden tras algunos temores. Cuidado con la desinformación, Los bulos circulan como la pólvora en redes sociales.

Ante todo, la labor de los sindicalistas tiene que ser la de exigir información diaria y veraz, formación continua para el manejo de las nuevas enfermedades infecciosas, actualización de todos los protocolos de actuación, asegurar las condiciones de seguridad de los y las trabajadoras y tener la madurez necesaria para no caer en el alarmismo que se ha instalado en muchos sectores de la sociedad.

Defiende el derecho a la salud

Cada vez es más difícil sostener económicamente las acciones de OSALDE y esta página web. Si crees en nuestro proyecto por favor, hazte socia.

You have Successfully Subscribed!